27 de enero de 2015
¿Sabes cuál es la principal diferencia entre una tarjeta de crédito tradicional y una tarjeta revolving? Estos instrumentos financieros son muy utilizados dentro del mercado de crédito y en algunas ocasiones se suelen confundir; sin embargo, no son lo mismo y es importante conocer en qué aspectos se diferencian.
En este artículo te explicaremos cuál es la diferencia entre tarjeta de crédito y tarjeta revolving y te contaremos cuáles son los riesgos que se corren al utilizarlas para financiar tus compras.
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Aunque para muchas personas las tarjetas de crédito y las tarjetas revolving son similares, la verdad es que existen algunas diferencias en cuanto a la forma en la que funcionan y conocer cuáles son te puede ser de mucha utilidad.
Para empezar, tenemos que hablar de la forma de pago, ya que mientras con la tarjeta de crédito tradicional se pueden financiar compras y pagar el saldo total, en algunos casos sin intereses, al mes siguiente, con la tarjeta revolving el pago se suele hacer en plazos mensuales cuyo importe es muy bajo, lo que suele brindar comodidad al usuario. Sin embargo, dicho pequeño importe mensual esconde una trampa dado que, al tener la tarjeta revolving unos intereses muy elevados, se consigue amortizar muy poca deuda, de modo que la deuda con el banco se reduce muy lentamente e incluso, en ocasiones, no deja de aumentar.
Obviamente, cuando la persona que tiene una tarjeta de crédito tradicional no hace el pago total, sino que abona el pago mínimo, y también se generan intereses. Sin embargo, dichos intereses son mucho más bajos que los de una tarjeta revolving.
Las confusiones surgen porque ambas tarjetas permiten a las personas acceder a una línea de crédito para hacer compras de manera financiada. Algunos incluso dicen que las tarjetas revolving son idénticas a las tarjetas de crédito, sin tomar en cuenta las diferencias que existen entre ambas.
Desconocer el impacto que tiene el pago en plazos puede llegar a ser muy perjudicial, ya que los consumidores pueden llegar a adquirir deudas que, en muchos casos, resultan difíciles de pagar e incluso perpetuas. En el revolving se ofrecen tarjetas con intereses abusivos e incluso usurarios, que afectan la capacidad de pago y las finanzas de las personas.
Otro punto que debemos tocar para explicar la diferencia entre tarjeta de crédito y revolving -quizá el más importante- es la tasa de interés que tiene cada una de estas tarjetas y las comisiones que se cobran por utilizarlas.
Ten presente que estos costes y gastos afectan significativamente a la cantidad total a pagar, por lo que en algunos casos, más allá del beneficio de la financiación, no resulta conveniente utilizar las tarjetas.
Esto sucede principalmente con las tarjetas revolving, que tienen tasas de interés muy altas. De hecho, el Tribunal Supremo considera que muchas de estas tarjetas incurren en nulidad por falta de transparencia en su comercialización e incluso en usura.
En España tenemos muchos casos de tarjetas revolving con una Tasa Anual Equivalente (TAE) muy superior al 25% o 30% que el Tribunal Supremo ha fijado como límite de la usura. A pesar de que son peligrosas para los consumidores y que el Tribunal Supremo ha declarado nulos muchos de los contratos de este tipo de tarjetas, el revolving se sigue utilizando como forma de financiación.
En contraste, con las tarjetas de crédito tradicionales se pueden pagar comisiones que pueden variar dependiendo del banco que las ofrezca, pero en cualquier caso, al igual que los intereses que se aplican, son mucho menores que en las tarjetas revolving.
Uno de los principales riesgos de usar las tarjetas revolving tiene que ver con la deuda, ya que en algunos puntos las personas deben más dinero en intereses y comisiones que en el total de los consumos que realizaron. Para algunos usuarios se convierte en un problema grave, ya que se siguen generando intereses y pueden pasar años pagando la tarjeta sin reducir la deuda.
El acceso al crédito también puede hacer que las personas gasten más de lo que necesitan y que se endeuden con cantidades que superan su capacidad financiera. Esto además, puede generar preocupaciones e impactar negativamente en su salud.
Es importante conocer los riesgos asociados a las tarjetas de crédito y a las tarjetas revolving, sobre todo, porque pueden tener un impacto financiero y emocional muy alto sobre quienes las utilizan.
Hasta aquí ha quedado más o menos claro qué es lo que diferencia a una tarjeta de crédito de una tarjeta revolving, pero ¿cómo saber cuál de ellas conviene para financiar tus compras?
La clave es la Tasa Anual Equivalente (TAE) que es el indicador que con mayor fiabilidad, nos va a informar de las comisiones e intereses que vamos a pagar con esa tarjeta. Cuanto menor es la TAE, menos comisiones e intereses se pagan. Cualquier TAE superior al 25% mensual nos debe hacer sospechar que nos encontramos ante una tarjeta revolving.
Como ya hemos dicho, las tarjetas revolving suelen ser atractivas al permitir que las personas compren a plazos y no tengan que desembolsar el total de sus compras de forma inmediata. A primera vista, parece una buena opción para quienes tienen problemas de liquidez, por la flexibilidad de los pagos.
Sin embargo, a pesar de que esto puede resultar atractivo, la verdad es que los contratos con este tipo de tarjetas son poco transparentes, y quienes las utilizan terminan pagando excesivos intereses y comisiones.
Las entidades financieras que comercializan tarjetas revolving tienen que cumplir con ciertas regulaciones y ofrecer suficiente información a los usuarios antes y después de firmar un contrato. Incluso es necesario que hagan un estudio previo sobre la solvencia del cliente antes de venderle la tarjeta. Pese a ello, muchas entidades financieras continúan comercializando estas tarjetas sin informar a sus clientes del coste real de las mismas.
En Cañizares Abogados podemos ayudarte a gestionar tus reclamaciones si tienes problemas con una tarjeta revolving. Puedes contactarnos para saber cuáles son los mecanismos que tienes a tu disposición en caso de que no hayas recibido información suficiente sobre el funcionamiento de la tarjeta y sus condiciones de uso.
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