Desahucio de Personas Vulnerables: Derechos y Protecciones Legales

En el complejo escenario actual de la vivienda y los derechos asociados a ella, el desahucio emerge como uno de los procesos más delicados y, a menudo, traumáticos.

Cuando este proceso afecta a personas vulnerables, la situación se torna aún más crítica. Las personas vulnerables, ya sea por su situación económica, salud, edad u otras circunstancias, enfrentan desafíos adicionales que pueden intensificar el impacto de un desahucio. Afortunadamente, el marco legal español reconoce estas dificultades y establece una serie de derechos y protecciones específicas para estas personas.

A continuación, te enseño estos derechos, cómo pueden ser invocados para garantizar un trato justo y humano y la recomendación de contar con un abogado experto en desahucios en el contexto de un desahucio, que no debe confundirse con un desahucio por precario y donde cabe resaltar que el dueño del inmueble tiene unos derechos sobre su propiedad y también debe conocer qué tiene que hacer cuando le ocupen la casa.

Entendiendo el concepto de desahucio

El desahucio es un procedimiento legal mediante el cual se termina de forma forzosa un contrato de arrendamiento y se recupera la posesión de un inmueble. Este proceso se lleva a cabo cuando el inquilino no cumple con sus obligaciones, siendo la más común el impago del alquiler, aunque también puede darse por otras causas, como la finalización del contrato sin que el inquilino desaloje la propiedad o el incumplimiento de cualquiera de las obligaciones esenciales establecidas en el contrato.

¿Quiénes se consideran personas vulnerables?

Las "personas vulnerables" son aquellas que, debido a diversas circunstancias personales, económicas, sociales o de salud, se encuentran en una situación de especial fragilidad o riesgo. Esta vulnerabilidad puede hacer que estas personas estén más expuestas a situaciones de desigualdad, discriminación o exclusión. A continuación, te muestro una lista de las personas que se consideran vulnerables.

1. Personas mayores: La edad avanzada puede llevar a una mayor fragilidad física y, en ocasiones, mental, lo que puede hacer que estas personas sean más susceptibles a situaciones de abuso o negligencia.
2. Menores de edad: Los niños y adolescentes, por su falta de madurez y autonomía, pueden estar más expuestos a situaciones de abuso o explotación.
3. Personas con discapacidad: Ya sea física, mental o sensorial, la discapacidad puede generar barreras en el acceso a derechos y oportunidades.
4. Personas en situación de pobreza o exclusión social: La falta de recursos económicos o el acceso limitado a servicios básicos puede generar una situación de vulnerabilidad.
5. Víctimas de violencia: Esto incluye a víctimas de violencia de género, violencia doméstica, abuso sexual, entre otros.
6. Migrantes y refugiados: Estas personas pueden enfrentar barreras lingüísticas, culturales y legales en los países de acogida.
7. Personas pertenecientes a minorías étnicas o culturales: Estos grupos pueden enfrentar discriminación o exclusión debido a sus características culturales o étnicas.

Criterios legales de vulnerabilidad

Los criterios legales de vulnerabilidad pueden variar según la jurisdicción y el contexto específico. Sin embargo, en general, estos criterios buscan identificar situaciones que pongan a una persona en desventaja o riesgo. Algunos de estos criterios pueden incluir:

1. Situación económica: Ingresos por debajo de un umbral determinado, desempleo prolongado, falta de vivienda, entre otros.
2. Situación de salud: Enfermedades crónicas, falta de acceso a servicios de salud, dependencia de cuidados, entre otros.
3. Situación familiar: Familias monoparentales, cuidado de personas dependientes, orfandad, entre otros.
4. Situación educativa: Falta de acceso a la educación, analfabetismo, abandono escolar temprano, entre otros.
5. Situación legal: Falta de documentación o estatus migratorio irregular, falta de acceso a servicios legales, entre otros.

Es importante señalar que la consideración de vulnerabilidad y los criterios legales asociados pueden variar según el país, la región y el contexto específico.

Protecciones legales para personas vulnerables en procesos de desahucio

Las personas vulnerables cuentan con una serie de protecciones y garantías en el marco legal para evitar que sean desahuciadas sin tener en cuenta su situación particular. Estas protecciones buscan garantizar el derecho a una vivienda digna y evitar situaciones de exclusión o desamparo. A continuación, te cuento cuáles son estas protecciones legales:

1. Suspensión del desahucio: En ciertos casos, y bajo determinadas circunstancias, es posible solicitar la suspensión temporal del desahucio para personas vulnerables. Esta suspensión puede ser solicitada por el inquilino o determinada de oficio por el juez y puede otorgarse por un período determinado y sujeto a ciertas condiciones. Durante este período de suspensión, se busca encontrar soluciones que protejan a la persona o familia afectada, ya sea a través de acuerdos con el propietario, realojos o intervenciones de servicios sociales.
2. Intervención de servicios sociales: Antes de llevar a cabo un desahucio, es obligatorio que los servicios sociales evalúen la situación de la persona o familia en cuestión. Si se determina que son vulnerables, se deben buscar alternativas habitacionales o soluciones que eviten el desahucio. Principalmente, busca garantizar que nadie quede desamparado o en situación de calle como resultado de un desahucio.
3. Medidas de realojo: En algunos casos, si se determina que el desahucio es inevitable, se deben tomar medidas para garantizar el realojo de la persona o familia afectada, especialmente si hay menores o personas con discapacidad involucradas.
4. Mediación: Se pueden establecer mecanismos de mediación entre el propietario y el inquilino para buscar soluciones amistosas y evitar el desahucio.

Recomendaciones para personas vulnerables ante un desahucio

Si te encuentras en una situación de vulnerabilidad y estás enfrentando un proceso de desahucio. Te ofrecemos una serie de recomendaciones como buscar asesoramiento legal o comunicarte con el propietario.

Buscar asesoramiento legal

Es fundamental contar con el apoyo de un abogado especializado en desahucios y en la protección de personas vulnerables. Este profesional podrá guiarte en cada paso del proceso, informarte sobre tus derechos y defender tus intereses ante el tribunal.

Comunicación con el propietario

En muchos casos, la comunicación abierta y sincera con el propietario puede llevar a soluciones amistosas. Es posible negociar condiciones, plazos o incluso encontrar alternativas al desahucio.

Si no logras llegar a un acuerdo directamente, considera la posibilidad de recurrir a un mediador. Esta figura imparcial puede ayudar a ambas partes a encontrar un punto medio y evitar el desahucio.

En resumen, enfrentar un desahucio siendo una persona vulnerable requiere de una combinación de asesoramiento legal, comunicación proactiva y apoyo emocional. Es esencial actuar con rapidez y buscar todas las ayudas disponibles para proteger tus derechos y bienestar.